La sequía que afecta a las granjas de Ohio está siendo catalogada como una de las peores en décadas.
Con 22 condados declarados zonas de desastre natural, los agricultores locales enfrentan un panorama cada vez más complicado debido a la falta de lluvias y las altas temperaturas.
U.S. Department of Agriculture (USDA) ha señalado que esta situación es crítica, y ha abierto la puerta para que los agricultores soliciten préstamos de emergencia.
Impacto en los agricultores
La sequía no solo ha afectado a los cultivos, sino también a las fuentes de agua y forraje. Los agricultores están viendo cómo sus tierras se secan rápidamente, lo que está poniendo en peligro la producción de alimentos y el ganado.
El estado de Ohio no había experimentado una sequía tan severa desde el siglo pasado. Los condados más afectados, como Athens y Meigs, se encuentran en un estado crítico, con niveles de sequía extrema según el Monitor de Sequía de EE. UU.
Te Recomendamos: Olas de calor y altas temperaturas: así estará el clima este verano en Ohio
¿Por qué ocurre la sequía?
La falta de lluvias sostenidas y un aumento en las temperaturas han creado las condiciones perfectas para la sequía en Ohio.
Según los expertos, las temperaturas superiores a los 90 grados Fahrenheit, junto con precipitaciones por debajo del promedio, han contribuido al problema.
El climatólogo estatal, Aaron Wilson, en declaraciones a Brownfield, explicó que el calor prolongado está afectando severamente a los cultivos de maíz y soja, dos de los productos agrícolas más importantes en la región.
Las tierras de pastoreo también se han visto gravemente afectadas, lo que ha llevado a muchos ganaderos a buscar alternativas para alimentar a su ganado.
¿Qué significa esto para los agricultores?
El impacto económico de la sequía aún no ha sido completamente evaluado, pero ya se están tomando medidas para mitigar los daños.
Los agricultores están buscando apoyo del Livestock Forage Disaster Program (LFP) del USDA, que les permitirá recibir asistencia financiera para mantener a su ganado.
Sin embargo, muchos temen que, sin una mejora en las condiciones climáticas, algunos se verán obligados a sacrificar ganado o a venderlo antes de lo previsto para evitar más pérdidas.
En las áreas más afectadas, los agricultores han tenido que transportar agua diariamente para su ganado, lo que ha incrementado los costos operativos.
Además, el deterioro de los pastizales está llevando a algunos a considerar la incorporación de suplementos nutricionales, algo que también aumenta los gastos.
Lee También: Así sucedió: las secuelas de las tormentas de Ohio. ¿Fuiste afectado?
Perspectivas futuras
Las previsiones meteorológicas no son alentadoras. Según Wilson, no se esperan lluvias significativas en las próximas semanas, lo que podría empeorar aún más la situación.
Los cultivos de maíz, en particular, han mostrado un crecimiento muy limitado, lo que podría llevar a una baja producción en la próxima temporada de cosecha.
El 63% del estado de Ohio está experimentando condiciones de sequía, con un 12% en una situación de sequía extrema.
Esto significa que muchas granjas verán afectada su capacidad de producción en los próximos meses.
Los agricultores están en un estado de incertidumbre, esperando que las condiciones mejoren, pero con pocos indicios de que la sequía ceda pronto.
Recursos disponibles
A pesar de la gravedad de la situación, los agricultores no están solos. La Extensión de la Ohio State University ha activado un equipo de respuesta a la sequía para ayudar a los agricultores a manejar esta crisis.
Se están ofreciendo recursos y asesoramiento sobre cómo gestionar la falta de forraje, el agua y el estrés en el ganado.
Además, el gobierno federal ha destinado fondos para préstamos de emergencia que podrían ser clave para la supervivencia de muchas granjas.
La sequía en las granjas de Ohio está teniendo un impacto devastador. Los agricultores enfrentan desafíos que no habían visto en décadas, y aunque están recibiendo apoyo, el camino hacia la recuperación será largo.
Las condiciones climáticas futuras serán determinantes para el destino de estas granjas, que juegan un papel crucial en la economía agrícola de Ohio.
